TENSO AMBIENTE EMPRESARIAL Y LABORAL EN JAPÓN
Por Tetsuya Kuroyabu; Corresponsal de AL Press en Japón
El pasado 1 de septiembre Seven & i Holding, gran holding japonés, vendió Sogo Seibu, grandes almacenes afiliados con 10 puntos de venta en Japón, al fondo de inversión estadounidense Fortress Investment Group. El precio de venta fue de 85 millones de yenes.(586.206 dólares.)Se calculó que el valor empresarial de los grandes almacenes rondaba los 220.000 millones de yenes, pero el precio final de venta se redujo drásticamente debido a la gran cantidad de deuda. (Un dólar vale 145 yenes.)
Fortress Investment Group tiene el plan para revender Sogo Seibu a Yodobashi Camera, gran distribuidor de electrodomésticos. En consecuencia, se instalará una enorme sección de cámara y electrónica de consumo en algunas plantas de Sogo Seibu, expulsando tiendas de marcas de lujo.
Los sindicatos de Sogo & Seibu se declararon en huelga el pasado el 31 de agosto en protesta contra la decisión de los directivos de la empresa. En una rueda de prensa previa a la decisión de la huelga, el presidente del sindicato, Yasuhiro Teraoka, destaco que las los directivos no habían facilitado al sindicato suficiente información sobre la venta de empresas prevista de antemano:
“La respuesta de Seven & Folligns es muy deshonesta. Eso influyó en la decisión de ir a la huelga, con el consenso de todos los sindicatos.”
Los miembros del sindicato distribuyeron folletos delante de la tienda cerrada, pidiendo que se reconsiderara el plan de venta de la empresa Sogo & Seibu es uno de los grandes almacenes más antiguos de Japón, fundado en 1830, cuyas ventas totales ocupan el tercer lugar en el sector de los grandes almacenes en Japón. Emplea a unas 4.549 personas en todo el país.
Como referencia, el fondo de inversión es empresa que adquiere empresas con dificultades financieras, las reestructuran y luego las venden a terceros.
Naturalmente, suelen decretar implacablemente grandes reestructuraciones y despidos de empleados antes de la reventa, La adquisición de Sogo & Seibu por Fortress Investment Group ha causado cierta inquietud entre los empleados. Es probable que este fuera el motivo de la huelga.
Japan Airlines, Nissan Motor, Google…
Las grandes empresas han llevado a cabo, con frecuencia, despidos de empleados para aumentar los ingresos, reduciendo los costes innecesarios. A principios de este siglo, después de introducirse la política de neoliberalismo radical, las empresas han podido despedir a empleados más fácilmente que antes.
Uno de ejemplos famosos de reestructuración en Japón es la de Japan Airlines, que quebró en enero de 2010. Posteriormente, la empresa despidió a unos 16.000 empleados para reconstruir la empresa. En consecuencia, beneficios empresariales se recuperaron rápidamente, pero los conflictos laborales han continuado hasta hoy.
Nissan Motor también ha llevado a cabo con decisión una gran reestructuración empresarial en el pasado. En 1999, después de que Carlos Ghosn Bichara fue nombrado Consejero Delegado (COO)de la compañía, inició el despido a 20,000 empleados. Nissan también habia recuperado su rendimiento gracias a la reducción de costes.
En un ejemplo reciente, la empresa líder de entrega de mercancía a domicilio Yamato Transport tiene previsto el plan de despedir a unos 30.000 repartidores el 30 de enero de 2024. Esta empresa necesita reorganizar su plantilla para asociarse con otra empresa.
Estas estrategias corporativas no son una tendencia exclusiva de las empresas japonesas. Por ejemplo, en enero de 2023, Google en Estados Unidos anunció que recortaría aproximadamente 12.000 empleados en todo el mundo. Se dice que esto se debe a que los accionistas exigen la reestructuración.
Una de las fuerzas más prometedoras para sustituir a la mano de obra reducida es la IA y la robótica, con las que las empresas pueden reducir los costes laborales considerablemente. Por ejemplo, los empleados de hoteles solían encargarse del procedimiento de check-in, pero ahora en algunos hoteles los robots reciben huéspedes.
Según las Estadísticas de Empresas Corporativas del Ministerio de Finanzas Japón. Los beneficios no distribuidos de las empresas japonesas rondaban los 130 billones de yenes (145 yenes por dólar) a finales de la década de 1990, pero aumentaron hasta los 463 billones de yenes en el fiscal de 2018.
El presupuesto nacional de Japón en 2023 asciende a 114,4 billones de yenes. Entonces, las grandes empresas han retenido una cantidad aproximadamente cuatro veces superior al presupuesto nacional.
Sin embargo, los ingresos de la mayoría de los trabajadores han disminuido ligeramente. La pobreza se extiende, sobre todo entre los jóvenes. La disparidad económica entre los japoneses es cada vez mayor.
Fracaso del neoliberalismo
Es la primera vez en 61 años que los empleados de los grandes almacenes se hubiera declarado en huelga.
Hace medio siglo, las huelgas de empresas eran habituales. Luego, la línea de colaboración obrero-patronal se extendió por Japón y el movimiento obrero decayó, produciéndose pocas huelgas. Por eso les sorprendió a muchos japoneses la huelga de Sogo & Seibu.
La huelga de Sogo Seibu no es más que un reflejo del descontento con el neoliberalismo.