SECRETOS DE LA INDUSTRIA PERIODÍSTICA JAPONESA
Por Tetsuya Kuroyabu; Representante de AL Press en Japón
En la industria periodística japonesa hay un tema que nunca se ha debatido abiertamente desde hace más de 50 años. Es que las cifras de difusión de periódicos están sobrevaloradas. Las empresas periodísticas entregan a centros de distribución los periódicos que incluyen ejemplares innecesarios como cuota y también obran precios de mayorista por ellos.
Esta práctica de la industria periodística constituye claramente una violación de la Ley Antimonopolio. También, es una cuestión de confianza en el periodismo. Sin embargo, ni la Comisión de Comercio Justo y ni la Agencia Nacional de Policía rara vez han emitido advertencias en contadas ocasiones.
Los anunciantes de los periódicos sospechan que las cifras de difusión están sobrevaloradas, pero raramente han protestado contra empresas periodísticas, porque tienen miedo de enfrentar a gigantes medios de comunicación que tienen una influencia significativa.
"Oshigami" se ha convertido en un término internacional
Yuji Hamanaka proveedor de Yomiuri Shimbun, el mayor periódico japonés, con una tirada de más o menos 6 millones de ejemplares, dirigió un centro de distribución desde abril de 2012 hasta junio de 2018.
Cuando se hizo cargo del proveedor, la tirada oficial del periódico de su centro era de 1641 ejemplares. Sin embargo, sólo hubo 976 suscriptores. La situación muy similar se había mantenido ininterrumpidamente, y Hamanaka cerró su negocio seis años después de abrirlo.
La mayoría de los lectores de periódicos tienen un contrato con el proveedor, por lo que pocas personas acuden al centro de distribución para comprar periódicos.
Periódicos no distribuidos se denominan "oshigami" en japonés. Esta palabra 'oshigami' ya se ha convertido en un término internacional, y Wikipedia en inglés tiene una descripción sobre 'oshigami'. La traducción al español es la siguiente:
"Oshigami es una práctica de la industria periodística japonesa que describe la sobreoferta deliberada de periódicos a proveedores y empresas para beneficio del mayorista"
Wikipedia afirma que es el mayorista quien obtiene el beneficio por parte de “oshigami”, pero esto no es correcto. Son las empresas periodísticas los que se benefician. Esto se debe a que las empresas periodísticas entregan los periódicos directamente en los centros de distribución.
Sin embargo, las empresas periodísticas han alegado, entre otras cosas, que los ejemplares de periódico sobrantes son adquiridos por los centros de distribución con el propósito de que los utilicen para actividades de venta.
Aunque existe cierto debate sobre este punto, el hecho importante es que hay un gran número de periódicos que no se entregan a ninguna casa, lo que genera enormes cantidades de dinero negro.
Enormes cantidades de ingresos ilícitos
Yo he investigado sobre este tema del “oshigami” desde 1997. Según los datos que he obtenido, entre el 20% y el 30% de periódicos de tirada diaria en Japón son "oshigami”. Tengo muchos documentos para probarlo.
Por ejemplo, en 2004, obtuve un documento interno filtrado de la oficina del presidente del Mainichi Shimbun, una de las mayores empresas periodísticas. El documento se titulaba " Transición del número de certificados expedidos".
Según este documento, en octubre de 2002, el diario Mainichi Shimbun tenía una circulación media de 3,95 millones de ejemplares (tirada diaria), mientras que el número de certificados expedidos" a los suscriptores fue de 2,51 millones.
La diferencia entre las cifras es 1,44 millones, que son “oshigami”, aunque era necesaria una pequeña tirada de reserva en caso de avería del periódico.
Esta cifra corresponde al 36% de los ejemplares entregados por el Mainichi Shimbun a sus distribuidores en todo Japón.
Los beneficios ilícitos obtenidos por el Mainichi Shimbun con los 1,44 millones de ejemplares de “oshigami” ascienden a 25,920 millones de yenes anuales, según mis cálculos. Es aproximadamente 172,8 millones de dólares.
(Calculado suponiendo un precio al por mayor de 1.500 yenes mensual por ejemplo")
Estrecha relación entre las empresas periodísticas y el gobierno
Numerosos centros de distribución están endeudados con los bancos por culpa de “oshigami”, que ha sido un grave problema social subacuático en Japón.
El 21 de diciembre de 2017, un propietario del centro de distribución se quemó hasta la muerte en protesta por “oshigami” en los lavabos de la sede central de Nikkei Shimbun, el diario de Información financiera. Sin embargo, las empresas periodísticas japonesas no le ponen fin a esta práctica comercial.
Hace unos 20 años, se descubrió que Dallas Morning News, periódico de Texas, EE.UU. había falseado la difusión de su periódico. La empresa periodística pidió disculpas y reembolsó las tarifas publicitarias a sus anunciantes.
Sin embargo, el porcentaje de “oshigami” era mucho menor que en los periódicos japoneses. Fue del 5% en la edición dominical y del 1,5% en la diaria.
¿Por qué el gobierno japonés no prohíbe "oshigami"? Sospecho que la práctica de “oshigami” es una política para controlar a las empresas periodísticas. Las empresas periodísticas obtienen enormes beneficios porque el gobierno no prohíbe el oshigami.
A cambio, las empresas editan el contenido del periódico para que sea más progubernamental. Sospecho que hay un acuerdo secreto entre ellos.