LA INÉDITA LEY DE SALUD MENTAL EN ECUADOR
Conversación con Ana Herrera; vicepresidenta de la Comisión de Salud en la Asamblea Nacional.
Exclusiva entrevista de Gabriela Castillo; Representante de AL Press en Ecuador
Más de una década demoró la aprobación de la Ley de Salud Mental en Ecuador. El Pleno de la Asamblea Nacional aprobó con 130 votos una nueva norma que promueve, entre otras cosas, el derecho a servicios que garanticen la salud mental de las personas, en todas las etapas de su vida.
El 14 de diciembre, los legisladores resolvieron allanarse a las observaciones que fueron formuladas por Guillermo Lasso, durante su régimen. Con la nueva norma se espera sobre todo reducir los casos de suicidios en el país.
Según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), entre 2000 y 2021, casi 20.000 personas se quitaron la vida. En diálogo con la Agencia AL PRESS, Ana Herrera, vicepresidenta de la Comisión de Salud, explicó las implicaciones de esta nueva norma.
¿Qué representa para usted la aprobación de una norma orientada a la salud mental?
HA: Lo que se aprobó y en la Asamblea Nacional es un tema histórico. Era una tarea pendiente. Éramos de los pocos países en la región que todavía no contábamos con una Ley de Salud Mental. Esta es una unificación de 10 proyectos de ley que fueron presentados por varios legisladores en el período pasado, que se trató en la Comisión de Salud, que fue aprobada pero que fue vetada de manera parcial por el Ejecutivo.
La vetó parcialmente por inconveniencia y se enviaron objeciones a 12 artículos; se revisó en la Comisión de Salud y elaboramos un informe que es no vinculante donde se recomendó el allanamiento.
Con esta nueva norma ¿qué viene?
HA: En esta etapa lo que le corresponde al Ejecutivo es elaborar el reglamento en un plazo máximo de seis meses. Es decir, el presidente (Daniel Noboa) debe disponer al Ministerio de Salud para que elabore el reglamento. Luego de ello, pasa al Registro Oficial y así podemos contar con esta ley para que se aplique.
Esta norma es inédita en Ecuador ¿por qué su trascendencia?
HA: Es necesario señalar que uno de cada ocho personas en el mundo sufre algún trastorno mental y eso se evidenció con la pandemia del covid. Se hicieron presentes los casos de suicidios. Entre 2020 y 2021, en el mundo, se registró que uno de cada 100 fallecimientos de jóvenes fue por quitarse la vida.
Una de cada ocho personas sufre de trastorno mental. El problema es más grave si se toma en cuenta que la Organización Mundial de la Salud indica que deben existir 23 especialistas por cada 100.000 habitantes, pero en Ecuador hay una brecha de 2.056 psicólogos en primer y segundo nivel de atención.
¿Qué establece la Ley de Salud Mental que no hayan establecido otras leyes?
HA: Lo que propone la ley es la prevención integral para las personas con un eje de política de la salud mental, proporcionar atención integral, promover los derechos de las personas con algún trastorno mental. Eso nos obliga además a fomentar el desarrollo de planes y programas de promoción de salud mental con calidez y calidad.
El Proyecto del Código Orgánico de la Salud (COS) es otro tema pendiente de debate en el Pleno. En caso de requerir los votos, la norma podría pasar al Registro Oficial Como Comisión ¿están interesados en que se apruebe el Proyecto?
HA: Hay que entender que en la Comisión hay diferentes legisladores con distintas posturas de diferentes organizaciones políticas y cada una tiene que ir un poco consensuando con la opinión del resto de sus compañeros. Sin embargo, la posición de la Comisión ha sido favorable a la aprobación de este código, ya que además permitiría que muchas de las leyes que están pendientes de ser tratadas en la Comisión sean incluidas dentro de este código. Por lo tanto, podríamos avanzar con otros temas que también son importantes y necesarios en el país.
¿Usted si está interesada de que se apruebe el proyecto del COS?
HA: Sí. De manera personal es un código que puede ayudar muchos problemas del país y que es necesario. Hay cosas que debemos corregirlas, pero siempre es mejor tener un código y trabajar con un código que seguir trabajando con uno que ya no está en vigencia, que ya quedó obsoleto.
En caso de que no llegara a probarse el proyecto del COS ¿Qué alternativa existe?
HA: Si no hay los 92 votos que se requieren, el COS se archiva y ahí la opción de cualquier legislador o incluso nosotros como Comisión es volver a presentar el proyecto de ley.
Es decir, un nuevo trámite como si fuese cualquier ley: hacer la propuesta, presentarlo en la Unidad de Técnica Legislativa para que revise y cumpla los requisitos legales y constitucionales. Luego debería pasar al Consejo de Administración Legislativa (CAL) para que califique y mandar a discusión de la Comisión en donde se aboca conocimiento y empieza el tratamiento.
El proyecto de ley tiene que haber discusión y debate para la aprobación del informe para primer debate; recoger los aportes que se hagan en el Pleno y por los otros legisladores, volver a la Comisión para elaborar el informe para segundo debate, ir a votación en el caso de ser aprobado. De ahí, pasaría por la revisión del Ejecutivo y el veto parcial o total. Y luego ya, pues si se aprobara la elaboración del reglamento y la publicación el registro oficial. Pero claro, esto nos va a llevar más de un año.
¿Qué va a pasar con los proyectos que no entraron al cronograma de actividades de la Comisión?
HA: El cronograma no es cerrado. Hay temas que podríamos incluirlos dependiendo también de la urgencia o de la necesidad. Hay proyectos de ley que están listos para evocar conocimiento porque se priorizaron. Los que están ya en tratamiento, difícilmente van a poder ser resueltos por los tiempos que hay que cumplir.
Por eso hemos priorizado de alguna manera los que ya están en tratamiento para intentar resolverlos antes de que termine el año y medio que va a durar esta legislatura.
En días pasados, durante una reunión de la Comisión se decidió convocar al Ministro de Salud para que explique sobre una declaración en donde dijo que no realizó curso de compras públicas ¿Qué pasaría en caso de que el Ministro de Salud no llegara a asistir con a la convocatoria?
HA: Fue una un planteamiento que hiciera uno de los legisladores en la mesa. El ministro de la salud tiene la obligación de acudir a la Asamblea Nacional las veces que sea requerido para rendir cuentas a los ecuatorianos a través de nosotros como legisladores de las acciones que está llevando a cabo desde el Ministerio.
Pero hay otros temas que para nosotros son también importantes como estos y saber qué se está haciendo respecto de la tabla de umbrales, reabastecimiento de medicamentos en los hospitales, cómo están funcionando los centros médicos.
Él tiene que asistir, en el caso de que no viniese se le volvería a hacer una insistencia volviéndole a reagendar una hora y una fecha distinta y finalmente, si no acudiese ya sería la presidencia de la Asamblea Nacional quien directamente le haga la convocatoria hasta que asista.
En caso es no asistir si podría tener una sanción por incumplimiento de funciones, porque una de sus obligaciones es acudir a la Asamblea Nacional las veces que sea solicitado.