APERTURA DE EURASIA PARA AMÉRICA LATINA
Por Roberto Trobajo; Director General de AL Press
Globalizar la solidaridad y cooperación es vital en estos tiempos donde la humanidad clama por cambios para el bien de todos.
Rusia, líder impulsando el anhelado mundo multiparticipativo, aboga por acercamientos con todas las naciones, y de manera especial con Latinoamérica.
Tender puentes que acerquen países es una de las prioridades rusas; muestra elocuente de ese accionar, para unir voluntades, devino el foro “Apertura de Eurasia para América Latina”, acontecido el 18 de octubre de 2023, en el Aula Magna de la universidad La Gran Colombia, prestigiosa casa de altos estudios que acogió este importantísimo evento organizado por la Embajada de la Federación de Rusia en Bogotá.
Diplomáticos de varios países, académicos y personalidades colombianas, compartiendo ideas, conocieron de primera mano sobre el quehacer de Rusia liderando colaboraciones en América Latina.
Loable la conferencia magistral dada por el señor Igor Varlámov. Ministro Consejero y Encargado de Negocios de Rusia en Colombia.
Memorables sus palabras al resaltar que hoy en día Eurasia está pasando por unos cambios fundamentales y a velocidades impresionantes.
Enfatizando estar “seguro de que la apertura de nuestros dos continentes puede y debe traer beneficios mutuos”.
IV: La percepción de Moscú del panorama político internacional actual para el proceso de acercamiento entre Eurasia y América Latina, es que ahora, ante nuestros ojos se está formando un nuevo orden mundial multipolar más justo que refleja la diversidad cultural y civilizatoria del mundo.
El futuro se está perfilando en la lucha. La mayoría global que representa el 85% de la población de la Tierra, aboga por una distribución más equitativa de los bienes globales y el respeto por la diversidad civilizatoria, así como por una democratización coherente de la vida internacional.
Por otro lado, un pequeño grupo de países occidentales encabezados por EEUU busca frenar el curso natural de los acontecimientos con el uso de métodos neocoloniales y mantener su dominio que está disminuyendo.
IV: La línea agresiva de la minoría occidental que es llevada a cabo en intereses propios ha provocado una grave crisis en las relaciones internacionales. Crecen los riesgos de un conflicto global. Al mismo tiempo, sí que existe una salida de esta situación. Para empezar, todos habrían de darse cuenta de su responsabilidad por el futuro del mundo.
Hace falta aplicarse a fondo, para que el espíritu de la multipolaridad plasmado en la Carta de las Naciones Unidas se haga realidad. Es cada vez mayor el número de países de la Mayoría Mundial busca reforzar su soberanía y defender sus intereses nacionales, sus tradiciones, cultura y forma de vivir. No desean que se les imponga nada, quieren tener amigos y comerciar entre ello y con el resto del mundo, únicamente de manera paritaria y mutuamente beneficiosa, en el marco de la arquitectura multipolar que se está formando. Estos ánimos prevalecieron en las recientes Cumbres del BRICS, G-20 y la Cumbre de Asia Oriental.
Está ganando protagonismo la tarea de reformar cuanto antes los mecanismos de la gestión global. EEUU y sus aliados han de dejar de contener de manera artificial la redistribución de los votos basados en las cuotas en el FMI y el Banco Mundial, reconociendo el peso económico y financiero real de los países del Sur Global. Hace falta también desbloquear con urgencia el funcionamiento del Órgano de solución de diferencias de la OMC.
Se vuelve cada vez más solicitada la decisión de ampliar el Consejo de Seguridad exclusivamente a través de la eliminación de la escasa representación en el mismo de los países de Asia, África y América Latina. Es importante que los nuevos miembros del Consejo, tanto los permanentes, como los no permanentes gocen de autoridad en sus regiones y en tales organismos globales como el Movimiento de Países no Alineados, el Grupo de los 77, la Organización de Cooperación Islámica.
Al mismo tiempo, hace falta aprovechar al máximo las potencialidades de las asociaciones de nuevo tipo que reflejan los intereses del Sur Global. Es, en primer lugar, el BRICS que aumentó considerablemente su autoridad, al término de la Cumbre de Johannesburgo y goza ahora de una influencia realmente global. A nivel regional es evidente el renacimiento de tales organismos, como la Unión Africana, la CELAC, la Liga Árabe y demás. En la región euroasiática está en marcha el proceso de la armonización de los proyectos de integración en el marco de la Organización de Cooperación de Shanghái, la ASEAN, la Unión Económica Euroasiática – de la que vamos a hablar aquí - y otros formatos.
Quisiera recalcar que estas organizaciones, a diferencia de algunos formatos promovidos por Occidente, no buscan dividir, armar intrigas, tener amistades contra alguien. Creo que este es el factor principal que hace la profundización de relaciones entre Eurasia y América Latina muy atractiva para ambas.
Eco de estas reflexiones fueron las palabras de la señora Olga Kupreyeva, Encargada de Negocios de Belarús en Colombia, al afirmar que America Latina es uno de los centros políticos y económicos más importantes del mundo multipolar emergente.
OK: Destacando que hoy el mundo está pasando por una etapa de transformación seria y entrará en un nuevo paradigma de desarrollo.
Belarús está convencida de que a través de la cooperación regional se construirá un nuevo algoritmo para las relaciones internacionales.
Cuba también estuvo presente en este importantísimo foro: el embajador cubano Javier Caamaño Cairo, exaltó la colaboración que la isla caribeña viene recibiendo de Rusia y Belarús.
JC: Los cubanos destacamos lo vital que resulta la cooperación entre países encaminándonos a un mundo multiparticipativo.
Todos los asistentes a este encuentro, organizado por la Embajada de Rusia y la Universidad Gran Colombia, concluimos -unánimemente- que este tipo de eventos aportan mucho a los esfuerzos por lograrse el mundo mejor que la humanidad anhela.